El sueño de la razón produce monstruos garabateados

Tras el pequeño paréntesis del Foro Social Mundial, vuelvo a la secuencia inicial. Yo que no sé dibujar, que no sé nada de perspectivas, de proporciones, de profundidades, tengo entre manos esta idea y quiero desarrollarla. Ante los primeros resultados de Nero se me vislumbró un camino muy largo por andar, así que decidí ir en sentido contrario, en vez de dibujar a Nero, lo desdibujaría, si es que tal cosa realmente existe. Nero debería ser el resultado de dos o tres trazos muy sencillos, la unión de tres o cuatro figuras geométricas y ya. El fracaso fue rotundo y no vale la pena mostrarlo. Sin embargo, a partir de ahí intenté progresar en la búsqueda de Nero, con un resultado que también puede considerarse desastroso, pero que al menos produjo alguna anécdota. Las próximas entradas hablarán de ello.

Reciclando el Foro Social Mundial

Nero en el Foro Social Mundial

Nero me pone un parao

Entre las primeras cosas que averigüé sobre el pensamiento buhoneril es que (tal vez para desprenderse de una palabra con connotación negativa, tal vez para agrupar con la nueva designación a más gente) a los buhoneros no les gusta que le digan buhoneros. Nero no fue la excepción.

Pensamiento buhoneril

Tras la mancheta sobre el mural de Cruz Diez, me pregunté si en verdad un buhonero habría dicho lo que dijo Nero, si el "lleve tres por diez mil" es una frase propia del pensamiento buhoneril. Pero, ¿existe tal cosa como un pensamiento buhoneril? ¿Cómo sería ese pensamiento? ¿Sería equiparable al pensamiento de izquierda o al pensamiento liberal? ¿O es más bien un estereotipo gremial o de nacionalidad, algo así como "todos los sociólogos son unos hablapaja" o "todos los argentinos se creen la gran cosa"? Me propuse entonces investigar más sobre el pensamiento buhoneril.

Cruz Diez y Nero

En ese momento, estaba en pleno desarrollo la controversia por la decisión (y acción) de demoler un mural del maestro Carlos Cruz Diez en La Guaira. Si Nero pretendía ser una caricatura editorial, tenía que decir algo al respecto. Pero como buen buhonero, lo que dijo fue:

El Búho Fénix

Cuando Nero renació de las cenizas del olvido,
lo hizo de esta forma:

Distintas versiones de Nero

Desde ese primer dibujo, y tras casi un año archivado, Nero ha vivido distintos intentos de tener un rostro propio y permanente. Nada me ha dejado medianamente satisfecho, pero creo que mi mano ha empezado a soltarse un poquito. En los próximos días les mostraré las diversas caras que he intentado darle a Nero.

Primera versión de Nero

Nacimiento de Nero

Nero nació como un simple juego de palabras, por buscar dentro de ellas nuevas posibilidades. Recuerdo que estaba en una oficina de registro, haciendo un trámite sin sentido, y en medio de la espera y sin saber por qué estaba pensando en los buhoneros, se hizo visible el personaje que habitaba dentro de la palabra. Tomé mi libreta y dibujé lo más parecido a un búho que pude dibujar, y a su alrededor puse una especie de tarantín vendiendo ropa. Archivé la idea casi por un año, o más, no estoy seguro, pero de pronto volvió y se me ha convertido en una pequeña obsesión.

No sé dibujar

No sé dibujar, no sé pintar, no sé rellenar sin salirme de la línea, no soy bueno ni con las proporciones ni con las perspectivas, pero por cosas del destino, se me ocurrió un personaje, creé un personaje para ser dibujado: un búho que se llama Nero, el Búho Nero, buhonero de profesión o tal vez por naturaleza. Pretendo hacer de él una especie de caricatura editorial... si algún día logro dibujar dos Neros iguales.